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ESTESIS: COMPARTIENDO PERCEPCIONES MUSICALES

  • Foto del escritorCamilo Arredondo

Lucha de Gigantes: Desde Antonio Vega hasta Love of Lesbian

Una de las más emblemáticas canciones de Antonio Vega es Lucha de Gigantes. Y si hay una común percepción de ésta en la diversidad de analistas, es la enigmática letra que la compone. Algunas personas atribuyen esta canción a la terrible adicción a la heroína del autor, y con justa razón, pues el mismo artista reconocería que "Se dejaría llevar por ti", otra de sus conocidas canciones, alude a este conflicto interno.


Pero indagando y analizando un poco más, ese no parece ser el motivo de inspiración. En una de sus últimas entrevistas con Rolling Stone aclaró que guarda relación con la gran dicotomía entre el cosmos y el individuo. La enormidad versus la pequeñez, la vertiginosa realidad de la "fragilidad en un mundo descomunal". Y esto sí tiene bastante sentido con su declarado gusto por la astrofísica.


Aunque sea complicado dar un punto final a esta cuestión, la primera entrada de este blog busca analizar los diversos registros fonográficos a los que podemos acceder de "Lucha de Gigantes", para así comprender sus elementos desde lo musical, y no sólo considerar alusiones relacionadas al texto. Específicamente puedo percibir algunos aspectos interesantes en la grabación de 1987, en el álbum "El momento" de Nacha Pop; la versión en directo del año 1997, publicado en el álbum "Básico" de Antonio Vega en su era en solitario; y la versión de Love of Lesbian en colaboración con Zahara, publicada el año 2010 en el EP "El alpinista de los sueños: Tributo a Antonio Vega". Todas estas versiones las puedes escuchar en cualquier plataforma digital.


Los tres registros son muy disímiles entre sí, considerando el año de producción, el estilo, incluso la instrumentación presente. Sin embargo, un elemento en común que he podido analizar para sacar mis propias conclusiones, es precisamente la alusión a elementos antitéticos que nos transmiten la sensación de grandeza del cosmos versus la pequeñez del ser humano y su individualidad. A continuación desglosaré los elementos presentes en cada versión y luego los resumiré en un cuadro.


Instrumentalmente hablando, hay un elemento común que refiere a la intimidad que nos transmite la guitarra acústica y la voz solas. Esto se contrasta de diferente manera en las tres versiones: Nacha Pop incorpora una batería reverberante, propia de la sonoridad ochentera, pero que pareciera tener una segunda función; la de establecer un espacio enorme, acompañada de sintetizadores y/o un ostinato de guitarra eléctrica con efecto chorus, que nos transmite una sensación de espacio sideral. La versión unplugged de Antonio Vega en directo no contiene los efectos de la versión original, pero se las arregla acentuando las secciones instrumentales con un quiebre rítmico particular: superpone una métrica ternaria simple (3/4) a la binaria compuesta (6/8) establecida principalmente en la canción. La versión de Love of Lesbian ft. Zahara mantiene el contraste a partir del uso de las voces masculina y femenina, las que se reparten distintas estrofas y/o frases, compartiendo algunos momentos álgidos de cada sección, acentuando el texto principalmente. Dado su lenguaje más pop, esta versión se centra mucho más en las voces que las anteriormente descritas. Estructuralmente, todas las versiones organizan sus partes de acuerdo al texto, pero hay algunas diferencias en cuanto a la aparición de ciertos elementos. La versión de Nacha Pop y de Antonio Vega en directo, poseen una sección instrumental en la que se establece una tonalidad mayor, luego de la frase "monstruo de papel, no sé contra quién voy / ¿o es que acaso hay alguien más aquí?". Para mí, este cambio de modo nos muestra el "mundo descomunal" en el que estamos insertos, siendo incapaces de percibirlo todo, "los fantasmas de algún extraño lugar". Vuelve al modo menor con una frase desgarradora: "Deja que pasemos sin miedo", y en ambas versiones es cantada sólo una vez. La primera versión posee un pequeño fill de batería, pero sin mantener un patrón en adelante, quedando sólo el ostinato, sintes y guitarras hasta desaparecer todo en un fade out. La versión de LoL y Zahara no contiene el cambio de tonalidad, pero incorpora una sección de bronces con notas largas cumpliendo la misma función que el ostinato, la de mostrarnos la grandeza del cosmos. Se superpone la frase "deja que pasemos sin miedo", pero esta es cantada tres veces, primero por la voz masculina, luego voz femenina, y la última vez ambas voces. Otra solución bastante pop que mantiene el sentido de la canción.


A continuación puedes revisar los distintos aspectos en este recuadro resumen:

​Versión de registro fonográfico

Elementos antitéticos

Nacha Pop (1987)

  • Intimidad de guitarras acústicas versus grandeza en la incorporación de una batería resonante por su reverberación y sintetizadores (aparición en 1:59).

  • Uso de ostinato con guitarra eléctrica "espacial", dado su efecto de chorus.

  • El ostinato aparece en 1:24, y reaparece intermitentemente para mantenerse hasta desaparecer la canción mediante un fade out.

  • Frase "deja que pasemos sin miedo" cantada una vez en la coda, mientras se entremezclan los distintos elementos de la canción: surge batería con pequeño fill, ostinato superpuesto a guitarra acústica y uso de sintetizador.

Antonio Vega en directo (1997)

  • ​Banda unplugged, por lo que no hay efectos de la versión original.

  • Sección instrumental en modo mayor en 2:44. Aparece por primera vez la superposición métrica de 3/4 en contexto de 6/8.

  • Frase "deja que pasemos sin miedo" cantada una vez.

  • Aparece ostinato de versión original en guitarra acústica en 3:13, y hay superposición rítmica 3/4 en un 6/8.

Love of Lesbian ft. Zahara (2010)

  • Voz masculina versus voz femenina. Alternación de estrofas y/o frases, y superposición en frases específicas.

  • Sección instrumental sin cambio de tonalidad ni modo, pero con incorporación de bronces que acompañan sección final, como el ostinato de la versión original.

  • Uso de frase "deja que pasemos sin miedo" tres veces. Primero voz masculina, luego voz femenina, para finalmente aparecer una combinación de ambas voces.

En conclusión, y desde una visión personal, creo que el sentido de la canción, reforzado no sólo en un ámbito del texto, sino en las representaciones sonoras de esta dualidad permanente que establece a nivel conceptual, sí logra transmitirnos un constante vaivén entre la grandeza del cosmos y la pequeñez del ser humano. Frases como "creo en los fantasmas terribles de algún extraño lugar, y en mis tonterías para hacer tu risa estallar / en un mundo descomunal siento tu fragilidad", datan de aspectos musicales que potencian la ambivalencia del ser con el otro y el ser en el universo. Te invito a escuchar esta canción en sus diversas versiones y disfrutar al gigante Antonio Vega.

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